Diario de Genomia: CUENTOS INFANTILES PROGRESISTAS (CIPS) : Más números del El Circo de la Moncloa: Los payasos presupuestarios de la tele y Pedrígula, el Gran Dictador

Edición dominical del 1 de noviembre de año del Señor -o del Maligno (¿?)- de 2020

“Con Aristóteles; Decimos que es justo lo que a muchos les parece justo; acepta no hagan suya con facilidad tan pronto se ha conseguido persuadirles de que es generalmente aceptada. El ejemplo actúa tanto sobre su pensamiento como sobre su conducta. Son borregos que siguen al manso allí donde les lleve: les resulta más fácil morir que pensar

El arte de tener razón
Arthur Schopenhauer

Dedicado al sumiso y aborregado pueblo de Genomia, a quien parece que le resulta más fácil morir que pensar

El Circo de la Moncloa y sus números

En las ediciones dominicales de los pasados 16 y 25 de octubre del año del Señor -o del Maligno (¿?)- de 2020 explicamos el origen del Circo de la Moncloa como experiencia formativa progresista de reeducación de las miembras y los miembros del Gobierno sectario y corrupto -pero progresista- del Emperador Pedro I El Tontilente. En efecto, expusimos entonces como el pueblo de Genomia, tras derrocar a dicho Gobierno y, al no saber qué hacer con tal ramillete de cráneos y cráneas privilegiados y privilegiadas -que diría Max Estrella en sus “Luces de Bohemia”- un tribunal democrático -que no demagógico- decidió que era necesario someterlos -por su bien- a un proceso de reeducación. Y alguien tuvo la idea de instalar en el Palacio de la Moncloa un Circo en el que el Presidente, los Vicepresidentes y Vicepresidentas, los Ministros y Ministras, los Secretarios y Secretarias de Estado, los asesores y asesoras, etc., etc. -así hasta un número de 666.666 sujetas y sujetos- aprendieran unas habilidades revolucionarias y desconocidas por completo para ellos: no mentir, no robar, trabajar, etc., etc.

Expusimos también algunos números del Circo de la Moncloa y anunciamos otros venideros (Los payasos asesinos, por Fernandito él Mascarillas y La Pequeña Salvadora; El harén de las leonas, por su domador Pablito I el Liberticida; Equilibrios fantásticos, por Pedrito I el Tonto del espejito, también llamado el Tontolente. el Tontiligno o el Doctoriraptor; el Picador de elefantes, por José Manuel Solaba; El tren de la bruja, por Carmencita la Cabra Calva; Yo no soy esa ¿o ese?, número de transformismo en el que el famoso Jeque Aksalram pasa de ser un guardia de asalto a ser una hermosa princesita; La mirada confusa, por Lola la Gorda Ojiplática donde hace juegos oculares al modo de un famosa y tristemente fallecida folclórica y el Gran espectáculo de cetrería por las Abex de Rapiña, bandada de aves carroñeras amaestradas por Pedro I El Tontilente).

El domingo pasado, hemos podido desarrollar solo dos de esos números: “Los payasos asesinos, por Fernandito él Mascarillas y La Pequeña Salvadora” y “Equilibrios fantásticos, por Pedrito I el Tonto del espejito, también llamado el Tontolente. el Tontiligno o el Doctoriraptor”.

Pues bien, la palpitante vida de Genomia nos obliga a adaptar semanalmente los cuentos para no quedarnos atrás como “testigos de la actualidad”.

Los payasos presupuestarios de la tele Pedrito y Pablito presentan el espectáculo “Estos presupuestos me dan la risa”

El pasado martes 27 de octubre de 2020, los payasos presupuestarios de la tele Pedrito y Pablito presentaron en el Circo de La Moncloa el espectáculo “Estos presupuestos me dan la risa”. Número cómico que se compone de las escenas siguientes:

a) Las pensiones se convierten en borrones porque la promesa de destinar 163.297 millones de euros, un 3,2% más que el Presupuesto de 2020 con un incremento, en línea con la previsión de IPC real, se basa en las promesas etéreas -en el tiempo y en la cantidad- de fondos de Euronia.

b) El sueldazo del Gobierno de progreso (bien entendido, , empezando por uno mismo) que ha incrementado sus retribuciones un 0,9%. Comenzando por su Presidente que se ha subido el sueldo tres veces desde que su nombramiento para cobrar, en el año 2021, 85.608 euros.

c) La digitalización bien entendida que también comienza por uno mismo porque el payaso Pedrito ha colocado digitalmente a todos sus amiguitos en puestos de gran rentabilidad.

d) Mas impuestos para los más ricos, entrando en escena varios personajes:

d.1) Unos familiares de un autónomo propietario de una pequeña tienda que falleció por el DIVOC 666 a los que se garantiza que el Impuesto sobre el Patrimonio tenga un carácter indefinido, de modo que no sea necesario prorrogarlo año tras año mediante una ley; quienes reciben la noticia agradecidos porque se les aporta seguridad jurídica sobre este tributo y se incrementa un punto el gravamen que pasa del 2,5% al 3,5%.

d.2) Un grupo de escolaras y escolaros (en definitiva, escolares) que van contentísimos a una merienda desconfinada porque saben que, en la tributación del IVA, se incrementará el gravamen del 10% al 21% a las bebidas azucaradas y edulcoradas con el objetivo de fomentar hábitos más saludables de la población ya que el consumo excesivo de bebidas edulcoradas contribuye al aumento del sobrepeso y la obesidad. En definitiva, como les repiten los medios de comunicación progresistas, pagarán más por su bien.

d.3) Un camionero contentísimo también al ver que el tipo estatal general del gasóleo pasará a ser de 34,5 céntimos por litro, frente a los 30,7 actuales

Y de este manera, el número acaba con los payasos presupuestarios de la tele, Pedrito y Pablito, saliendo en las televisiones progresistas para preguntar al público: “¿Cómo están ustedas y ustedos (en definitiva, ustedes)?» Y escuchar el balido unísono de las periodistas y los periodistos aguerridos respondiendo: bieeeen”

Pedrígula, El Gran Dictador

Un dictador era un magistrado de la República romana al que se le confería la plena autoridad del Estado para hacer frente a una emergencia militar o para emprender una tarea específica de carácter excepcional. Todos los demás magistrados estaban subordinados a su imperium y la posibilidad de que los tribunos de la plebe vetaran sus acciones o de que el pueblo apelara contra ellas era muy limitada. Sin embargo, para evitar que la dictadura amenazara al propio Estado, se impusieron importantes limitaciones a sus poderes: un dictador solo podía actuar dentro de la esfera de autoridad a la que estaba destinado y estaba obligado a renunciar a su cargo una vez cumplida la tarea que se le había encomendado, o al cabo de seis meses. (¡!)

(Como dice la canción: la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida)

Calígula, cuyo nombre completo fue Cayo César Augusto Germánico, nacido el 31 de agosto en Artium, Italia, fue un emperador romano que fue escogido como sucesión a Tiberio, quien efectuó la transferencia de la última legión de un estado que había estado bajo un procónsul senatorial a un legado imperial, completando así el monopolio del emperador del comando del ejército. Fue emperador desde el mes de marzo del año 37 d.C. hasta el 41 d.C. y se caracterizó por realizar una serie de locuras que lo caracterizaron: mandó a matar a todos los que le habían traicionado de palabra. Algunos historiadores creen que enloqueció luego de una grave enfermedad mental. Tenía un placer por matar y por torturar a sus prisioneros. También cometió el error de utilizar las contribuciones del Imperio para sus excéntricas diversiones. Construyó enormes barcos y bañeras utilizando monedas de oro. Este comportamiento provocó que se creara una gran conspiración en su contra, conspiración durante la cual fue asesinado.

El pasado jueves, las Cortes de Genomia entronizaron a Pedrígula como Gran Dictador de la Patria sumisa. Actuará con plenos poderes durante un periodo de 6 meses ininterrumpidos, ayudado en sus labores por dos tribunos de la plebe: Pablo I el Liberticida y Pablito Soltero el Descarriado.

Y el que tenga oídos, que entienda