Más allá del arco iris. Capítulo 7. Contacto con el FBI

Durante la visita al Museo, el Doctor Clark no logró recordar el nombre ni el teléfono de la agente del FBI que le había visitado en su día para solicitar su colaboración en las investigaciones que realizaban sobre el Doctor Shaoran y su vinculación con algún laboratorio clandestino. Por eso, cuando se despedían en la salida del Museo de Bellas Artes, le dijo a Francesco que intentaría recordar donde había dejado su tarjeta y, en cuanto diera con ella, le llamaría.

Tras despedirse, Francesco decidió dar un paseo por Boston de regreso a Harvard para intentar apreciar las maravillosas imágenes que Giulia le había relatado del otoño bostoniano. Así que comenzó su caminar por la amplia Avenida Huntington hacia Boylston St. para, desde allí, seguir hasta llegar al Common y atravesar sus hermosos jardines, puentes y praderas rodeadas de árboles teñidos de un color marrón rojizo que sonaba a suave decadencia.

Mientras tanto, el Doctor Clark regresó a su laboratorio y allí, en el fondo de uno de los bolsillos de una bata de laboratorio, encontró la tarjeta que le había dejado la agente del FBI, Shady Cooper, por si recordaba u observaba algo sospechoso en el campus. Recuperada la tarjeta, el Doctor Clark regresó a su casa sita en la Avenida Commonwealth en el barrio de Back Bay. Se trataba de una hermosa casa victoriana que había heredado su esposa. Una vez allí, telefoneó a Francesco que estaba caminando a la altura de la Biblioteca Pública de Boston para darle las señas de la agente Cooper del FBI. La llamada al móvil se convirtió en una empresa imposible por los cortes continuos que sufría la comunicación. De modo tal que ambos decidieron intentar comunicarse de nuevo cuando Francesco llegara a tu hotel. Este incidente incrementó la sensación de temor a estar siendo vigilados, lo que llevó a Francesco a pensar en la conveniencia de cambiar de hotel para dificultar el eventual control ajeno. Fue madurando este plan de mudanza durante todo el recorrido que le llevó hasta alcanzar la estación de metro de Park St. y, desde allí, a la de Harvard Square. Cuando llegó a su habitación del hotel Véritas pudo, finalmente, hablar con el Doctor Clark que le transmitió las señas las señas de la agente Cooper del FBI. Esa misma noche Francesco decidió ejecutar su decisión de cambiar de hotel y la discreción le aconsejó realojarse en el Irving House at Harvard, una casa de habitaciones sencillas del siglo XIX que mantenía una buena situación en Cambirdge próxima a la Universidad de Harvard y al MIT. 

Al día siguiente, Francesco telefoneó a la agente del FBI, Shady Cooper, con quien concertó una entrevista en un café del Quincy Market, donde la afluencia de gente era una garantía de la discreción de la reunión. En ella, la agente Cooper le confirmó lo que ya la había anticipado el Doctor Clark: estaban siguiendo una línea de investigación en torno al Doctor Shaoran por las sospechas fundadas sobre su vinculación con algún laboratorio clandestino al que le estaría facilitando los resultados de las investigaciones sobre epidemiología robótica a las que accedía en la Universidad de Harvard y en el MIT. Y añadió que esa no era la única línea de investigación que estaba siguiendo el FBI, sino que había una segunda que intentaba desentrañar una trama de “hackeos” informáticos de los resultados de las investigaciones en busca de una vacuna contra el DIVOC 666 que parecían estar patrocinados por determinadas empresas farmacéuticas. Fue, precisamente, esta segunda línea de investigación la que llevo a la agente Cooper a contactar, en su día, con el Doctor Clark, como experto en la materia para solicitar su ayuda. Y, entonces, el Doctor Clark le dio cuenta de los extraños y aparentemente inexplicables incidentes informáticos que venía sufriendo desde hace algún tiempo y de los rumores que corrían en el campus de Harvard sobre el Doctor Shaoran.

En su deseo de colaborar con las investigaciones del FBI y facilitar, de paso, sus pesquisas sobre la muerte de su hermana Giulia, durante la entrevista, Francesco entregó a la agente Cooper  el pendrive que le había facilitado el Doctor Costi con los correos electrónicos cruzados con Giulia y los dos informes que le había remitido Giulia desde Senlin y que había traducido su doctoranda, Paola Zhao: el Informe “Pandemia-DIVOC 666” remitido por el Doctor Shaoran a su padre, el General Sima y el “Informe sobre la implantación de un Nuevo Orden Mundial” (Informe NOM”) que el General Sima, Director del Departamento de guerra bacteriológica y química del Ministerio de Defensa del Glorioso Ejército Revolucionario había presentado ante el Comité Supremo del Glorioso Ejército Revolucionario.

CONTINUARÁ …