La maldad de los unos nace siempre de la estupidez de los otros
Hugges-Bernard Maret
Dedicado, con el cariño de siempre, al pueblo aborregado de Genomia para que escoja por sí mismo en que parte de la ecuación se sitúa
¡No se pierda las noticias de la última semana: El ¡Asalto a las Cortes! del Vice-Emperador de Genomia, Pablo I El Hiena y la cabalgata terrorífica del Emperador Pedrígula I
Diario de Genomia: Suplemento especial a la edición dominical del 10 de enero del año del Señor -o del Maligno (¿?)- de 2021
El pasado día 6 de enero, día de los Reyes Magos de Oriente (¿mucha casualidad?) se produjo otra noticia que obligó a este Diario a desplazar al ya famoso equipo de corresponsalas, corresponsalos y corresponsales de muy diversos sexos -binarios, no binarios y mediopensionistas- a cubrir el acontecimiento.
En torno a las cinco de la tarde (hora taurina, con perdón progresista), un grupo de encapuchados de Robemos, liderado por el Vice-Emperador de Genomia, Pablo I El Hiena asalto el impresionante edificio de las Cortes Generales, sito en la Carrera de San Homónimo de Maracas, al grito de: “¡¡¡Las va … cu …nas, para los hijos de los obreros, o sea, de los afiliados de Robemos y para sus madres, sus padres y demás progenitores simpatizantes del partido y cleptómanos progresistas en general!!!” Añadiendo: “¡¡¡Después, si sobran, para los del Partido de Seminaristas Ortodoxos Episcopalianos!!!”
Ante la extrañeza que causo dicho asalto, el portacoz de Robemos Azrael Minoral ofreció de inmediato una rueda de prensa -ofrecida en directo por La Secta Te Ve- en la que explico que el asalto fue un acto de patriotismo progresista popular -uno de los conocidos APAPROPOS- para hacer manifiestas las disensiones dentro de la coalición gubernamental de progreso. Por lo que lo calificó como un “Auto Golpe de Estado al 50%”.
El grupo asaltante pudo culminar con éxito su acción porque estaban de guardia, -es un decir- en el edificio de las Cortes Generales unidades del Ejército del famoso General Trueno, ascendido por su fe progresista, cuyos efectivos dejaron naturalmente el camino expedito a los asaltantes.
El grupo asaltante estuvo integrado, además de por el líder de Robemos y Vice-Emperador de Genomia, Pablo I El Hiena, por el portacoz del partido, Azrael Minoral y por dos subgrupos:
En primer lugar, la Sección femenina de Robemos, dirigida por la Vice-Emperatriz de Genomia y distinguida analfabeta, Nerea Oretmom y por la delincuente confesa, Isa Sierra., especialista en dedicar delicados epítetos a las mujeres policías que interrumpen sus frecuentes asaltos de jarabe demagógico y a sus madres y padres, con delicados símiles de la especie canica, que provocarían la envidia del mismo Esopo o sutiles combinados de ambos epítetos (“perras”, hijas de perra”, etc.).
En segundo lugar, el grupo asaltante estuvo integrado por la brigada móvil de Robemos, al mando del líder rosarino -así calificado por su afición a rezar el rosario- Pablo Equineche, a bordo de su famoso “Fórmula Uno del Progreso” y por el líder de Genomia del Vino Tinto, Pepito BMW, director general de convivencia pacífica en el Reino de Taifas correspondiente y conocido “cascadeur” de vehículos, especialista en estrellarlos contra árboles del camino mientras hace labores humanitarias a altas horas de la madrugada.
La cabalgata terrorífica del Emperador de Genomia Pedrígula I
Por si no hubiera habido suficientes emociones durante la semana que fenece, el día anterior al asalto, día 5 de enero, el aguerrido equipo de corresponsalas, corresponsalos y corresponsales de muy diversos sexos -binarios, no binarios y mediopensionistas- se vio obligado a cubrir otro acontecimiento estelar -de esos dignos de ser glosados por la famosa barda -y borde- de J.L. Rodriguez Descalzadero Eriel Nijap– que consistió en la cabalgata terrorífica del Emperador de Genomia Pedrígula I.
El origen de esta cabalgata se inició en el momento de la triunfal salida del Emperador de Genomia Pedrígula I del circo Romano -antes llamadas Cortes Generales– de Maracas, capital de Genomia, de cuya entrada dimos cuenta en este Diario la semana pasada.
Lo cierto es que el Emperador de Genomia Pedrígula I -llevado por el narcisismo psicopático que guía su existencia como un faro en la niebla- dijo: «Ya que Nos estamos aquí (porque siempre habla en plural mayestático como corresponde) con tan grata compañía, ¡Que siga la fiesta!». Y así fue como decidió asumir el mismo (en su mismidad) los roles de los tres Reyes magos y fue cambiando de atuendo e incluso de maquillaje para ocupar las carrozas de Melchor, de Gaspar y de Baltasar.
Como, en el momento de la salida del circo Romano -antes llamadas Cortes Generales- de Maracas, todavía no había completado su magnífico discurso de 66 horas, decidió continuarlo desde las sucesivas carrozas que fue ocupando, gracias a unos potentes altavoces que fueron recogiendo sus auténticas, al tiempo que interesantes palabras:
“¡Genomiesas, gernomiesos, gernomieses de todo sexo y condición!.
El año 2021 que se abre ante nuestros ojos es un año de recuperación y confianza. Después del sobrevivir al pasado 2020 gracias a mi acción de gobierno asombrosa, encaramos este año 2021 como un punto crucial para nuestro país. Quisiera ser muy gráfico: el año 2020 ha sido el año de una gran calamidad y de una gran resistencia. Pero este año 2021 puede ser -es más, debe ser- el año de una gran recuperación y para eso necesitamos una gran confianza comenzando por nosotros mismos como país. Así con la unidad y al acuerdo por bandera y con la gran autoconfianza con la que reconquistamos la libertad y nos deshicimos de la dictadura confío en las capacidades de las genomiesas y genomieses para sobreponernos a la adversidad.
En el primer semestre de 2021, coincidiendo con el cumplimiento de una primera parte del tiempo del mandato indeterminado, el Gobierno prevé haber completado importantes proyectos sobre los que había adquirido compromisos, hasta completar el 33,3% del total.
Así, hemos dado y daremos, con vuestra ayuda, una respuesta excepcional a un desafío excepcional (hermosa e inteligente reiteración del calificativo): La actividad legislativa en respuesta a la pandemia de la DIVOC 666 ha reforzado los principios de igualdad, justicia social y progreso que definían mi programa de investidura. La batería de medidas de este campo puede agruparse en torno a las siguientes áreas principales:
La primera, las medidas de apoyo a la respuesta sanitaria, porque la prioridad absoluta del Gobierno de Genomia fue salvar vidas, con bien es verdad que con muy poco éxito. Para ello, los estados de alarma, las medidas de confinamiento y la estrategia de vacunación han sido solo algunas de las decisiones -erróneas- del Gobierno en este campo, al que se han destinado una cantidad de recursos sin precedentes, tanto materiales como humanos, con pequeños desvíos de fondos públicos sin importancia. En particular, el Gobierno ha asegurado el refuerzo -tardío- de la protección, con el uso obligatorio -tardío y contradictorio- de mascarilla, y el control -caótico- de la movilidad, combinado el cierre temporal -tardío y descoordinado- de fronteras con la autorización de un programa piloto de apertura de corredores turísticos seguros, sin el más mínimo efecto sustancial. A ello, se ha sumado un impulso a la investigación -por parte de profesores jubilados- no solo con la aprobación del Plan Embiste para la ciencia y la innovación, con una inversión de más de 1.000 millones de euros, sino también con la participación de España en los proyectos de la multinacional farmacéutica “La Antigua Yanki” y el del Instituto Jeneroso de la Universidad de Harvardcete.
La segunda área de actuación ha sido la reducción del inevitable impacto económico que ha comportado una situación sin precedentes como esta pandemia. Las líneas CACO han avalado a 666.666 empresas, al tiempo que se han diseñado planes específicos -perfectamente inútiles- para el sector turístico, el agrario, la automoción, la hostelería, la cultura, el sector financiero y energético, y se han tomado medidas para acabar de hundir a Pymes y autónomos.
La tercera área recoge el llamado paraguas -roto- ocial, las medidas orientadas a salir todos unidos (unos más que otros), sin dejar a nadie atrás, de la prueba a la que estábamos siendo sometidos. Desde el Manicomio de la Moncloa y el Palacio de Ragapalag y con la vista puesta en los colectivos vulnerables, el Gobierno ha actuado para procurar que la emergencia agrandara una brecha de desigualdad que nos podemos permitir. El Ingreso Mínimo Existencial Inexistente (IMEI) ha supuesto una actuación patética, pero no la única. La promoción de las okupaciones de viviendas de ciudadanos fascistas por algunos ayuntamientos de progreso o el incremento de los cortes de suministros eléctricos gracias a un incremento progresivo y progresista de la factura de la luz del 26% en el último mes de nieve y hielo son otras de las más recientes.
Pero sin duda las más relevantes han sido la extensión de los IN-ERTES, que dieron esperanzas vanas a 3,4 millones de trabajadores en los momentos más duros. Una medida prorrogada gracias a los tres acuerdos sociales en defensa del empleo firmados con los patronos bizcochables y los sindicatos corruptos. Han sido días de terror en el campo de la protección a los consumidores que hemos extendido e incrementado mediante el incremento progresivo y progresista de la factura de la luz del 26% en el último mes de nieve y hielo.
La cuarta área ha consistido en la recuperación de la actividad en el ámbito académico, donde la inversión en digitalización y la adaptación de los criterios de evaluación, con la nueva LOLALOLE que permite pasar de curso con el número de suspensos progresistas que decidan las HAMPAS es una aportación al cultivo de la especia autóctona gallega del percebón y la percebona que hará las envidias del Cabo Roncudo.
Después de pasar la última de las carrozas reales ocupada por el Emperador de Genomia Pedrígula I y agotados los genomieses y genomiesas por su plúmbeo discurso, la cabalgata terrorífica siguió con las carrozas siguientes:
a) La carroza del paje de la muerte, presidida por el líder de la paz Reinaldo Igueto, acompañado por un grupo de jóvenes luchadores de Genomia del Norte exhibiendo hachas, pistolas, bombas y demás artilugios dialogantes y pacíficos. Esta carroza iba dejando a su paso por la calzada nevada un rastro de sangre que se deslizaba desde su depósito lleno de los cadáveres de niñas, niños jóvenes destrozados por las bombas de la paz. Circulaba detras de la carroza, intentando borrar el rastro de sangre, la brigada de limpieza imposible del Jeque Aksalram, antiguo azote de los asesinos.
b) La carroza de la paje de la salud, presidida por La Pequeña Salvadora, también conocida como la Ministra a la fuga y por el cantaror Fernandito «El mascarillas” que iba fundiendo sus ruedas en la nieve por el peso de los más de 70000 muertos que llevaba en su bodega.
c) La carroza del paje de la ciencia, presidida por la simpar ministra de educación, Luzbel Aalec, acompañada por el ministro de universidades (¿?) Rufino Castolls, El catalateño y por el de Ciencia y Tecnología (¿?) Pedro El Principito agarrado, en su inocencia, a un baobab. Esta carroza iba lujosamente decorada por una bandada de burras y burros alados en conmemoración de la promulgación de la la nueva LOLALOLE que permite pasar de curso con el número de suspensos progresistas que decidan las HAMPAS en una aportación al cultivo de la especia autóctona Gallaga del percebón y la percebona que hará las envidias del Cabo Roncudo.
e) La carroza del transporte aéreo, presidida por el ministro José Luis Solaba, acompañado por Dora La Exloradora; con las bodegas repletas de 40 maletas de sustancias áureas y blancas alucinógenas.
f) La carroza del milagro capilar, presidida por los hermanos Giup, el mayor Xino, sátrapa de la Taifa del Este, luciendo un espectacular peluquín y el menor Francisco, absolutamente calvo (de ahí el nombre de la carroza). Mientras Xino divertía a niños y mayores con sus espeluznantes malabarismos capilares, lanzando una y otra vez el peluquín al aire con grave riesgo de su vida, dadas sus enormes dimensiones y su peso específico; Francisco, ataviado de gitana, adivinaba los pliegos de condiciones de concursos futuros de jugosas concesiones audiovisuales.
Por último, la cabalgata terrorífica se cerró con el desfile del famoso coro de monjes Castrapenses, cantando en castrapiano (lenguaje mezcla de castrapo y gregoriano) las excelencias del diálogo multinacional y prudente. Hay que aclarar que esta congregación había sido confundida en su día con el grupo de expertos del Ministerio de Sanidad que, por su invisibilidad natural, había sido confundido, a su vez, con la Santa Compaña de las Ánimas Difuntas que, en noches de niebla, recorre los montes gallegos.
La retransmisión del ¡Asalto a las Cortes! del Vice-Emperador de Genomia, Pablo I El Hiena y de la cabalgata terrorífica del Emperador Pedrígula I por la Secta Te Ve
Y dio cuenta del desarrollo de estas jornadas inolvidables los programas de La Secta de Te conducidos por sus dos estrellas rutilantes: la agradable parejita de periodistas por la libertad, Dana Rotsap en su magazine “Objetivo hemipléjico” y King Kong, con su conocido programa “Al cojo vivo” (en bonito recuerdo de aquel luchador por la libertad del pasado siglo XX aunque poco amante del mobiliario urbano conocido como «El cojo manteca») que retransmitieron durante horas y horas ambos eventos de lucha por el progreso, intercalando anuncios capitalistas y el equipo de tertulianos de guardia, a los que les es igual comentar la boda de Juana que la de su hermana (con perdón por el machiso de la metáfora heteropatriarcal).
TODO PARECIDO CON LA REALIDAD NO ES PURA COINDIDENCIA, SINO TRÁGICA IDENTIDAD Y EL QUE TENGA OÍDOS, QUE ENTIENDA
CONTINUARÁ