Diario de Genomia: La vuelta al cole en los Diecisiete Reinos de Taifas y Rufino Castollls, El Catalateño, el Ministropiento o el Harapinistro

Edición dominical 6 de septiembre del año del Señor -o de la Bestia (¿?) – de 2020

Tres dedicatorias sobre la educación con sus respectivos destinatarios

Nunca trates de enseñar a un cerdo a cantar, perderás tu tiempo y fastidiaras al cerdo

Proverbio ruso

Al muy admirado e infame gobierno progresista de Genomia

Educar es formar personas aptas para gobernarse a sí mismas y no ser gobernadas por otros

Herbert Spencer

A las niñas y niños, jóvenas y jóvenes, de todo sexo y condición de Genomia, con la remota esperanza de que, dentro de muchos años, gocen de una educación que les permita formar su propio criterio

La educación es la habilidad de escuchar cualquier cosa sin que pierdas los estribos o la seguridad en ti mismo

Robert Frost

A lo sufridos, silentes, enmascarados y aborregados ciudadanos de Genomia que transitan hacia la ruina que se avecina cual rebaño de la mesta, pastoreado por -todos y los únicos- los medios de comunicación amigos del poder, con el deseo ferviente de que despierten sus conciencias antes de que asdquieran, definitivamente, la condición vasallos

Seguimos viviendo dentro de un hermoso cuento infantil

Queridos niños; y padres, madres y progenitores A, B o C; y abuelitas y abuelitos; y tías y tíos y sindicalistas y sindicalistos de la enseñanza y otros miembros de la “comunidad educativa” y de las Hampas:

Como sé que seguís esperando, con ilusión y ansiedad, el día de la vuelta al cole para encontraros -nadie sabe ni cómo ni cuando- con vuestras amiguitas y vuestros amiguitos (eso sí, , siempre que sus progenitoras A, B o C, en ejercicio de su libérrima voluntad de progreso, no hayan decidido aprovechar el verano para cambiarles de sexo); os vamos a seguir contando el bonito cuanto que sigue desarrollándose en el hermoso País de Genomia, dividido en Diecisiete Reinos de Taifas, en el que siguen viviendo -como reyes- Pablito e Irenita felices en su mansión del pueblecito de la sierra de Maracas llamado Ragapalag, protegidos en su intimidad por 666 Guardias Progresistas al mando del famoso y ascendente General Trueno.

La asombrosa historia del fantasma Rufino Castollls, El Catalateño, el Ministropiento o el Harapicida

Se ha conocido esta misma semana que fenece y gracias a su propio testimonio la bonita leyenda urbana de la desaparición del ministro de U(¿…?)es de Genomia, Rufino Castollls El Catalateño (así llamado por ser catalanista de afición y albaceteño de origen).

Esta leyenda comenzó a gestarse cuando Rufino Castollls, en los primeros meses de este año, tuvo el buen gusto de presentarse en el Senado de Genomia para exponer su programa de in-actividades vistiendo una hermosa camiseta con emblemas progresistas que quedaban convenientemente resaltados por su barriga prominente, todo envuelto en una “americana” (la prenda se llama así, no lo podemos evitar con perdón de los progresistas) cuyas costuras amenazaban una explosión con lanzamiento de sus botones contra sus señorías como balas mortíferas.

Afortunadamente para las madres y padres de la patria, la explosión mortífera no acaeció, pero tan peculiar -al tiempo que elegante, discreta y progresista- vestimenta le ha valido para añadir al sobrenombre del Catalateño, otros dos sobrenombres adicionales que dependen de la preferencia direccional y cualitativa: El Ministropiento, si se quiera dar preferencia a la condición de ministro sobre la de harapiento; o el Harapinistro, si se quiere enfatizar la condición de harapiento sobre la de ministro (siempre desde el máximo respeto hacia los indigentes y disculpando la comparación injusta y odiosa para ellos con los ministros).

Pues bien, la bonita leyenda urbana de la desaparición del ministro de U(¿…?)des de Genomia, Rufino Castollls se ha desvelado esta misma semana cuando aclaró que sus apariciones, en noches de luna llena, a las rectoras y rectores de universidades miembros de la Conferencia de Rectoras y Rectores Vanidosas y Vanidosos (CREVAVA) obedeció a su sana intención de anticiparles dos instrucciones esenciales para el comienzo ordenado y sin contagios del DIVOC 666 del curso universitario 2020/2021 que fueron: En primer, ligar, que todas las estudiantas y todos las estudiantos acudieran a las aulas pertrechados de antifaces venecianos y la segunda, que las aulas mismas fueran aireadas constantemente por máquinas de vientos huracanados

La Secta de Empresarias y Empresarios Adoradores del Boletín de Obscenidades Espantosas (SEABOE)

Otra bonita historia acaecida esta semana en Genomia fue el acto de adoración de Pedrito el Niño del Espejito por las miembros y miembro de la Secta de Empresarias y Empresarios Adoradores del Boletín de Obscenidades Espantosas (SEABOE), magnífcamente organizado -como siempre- por Ivancito, El Niño del Injerto y retransmitido -con el brillo que merecía- a través de -todas y las únicas- las televisiones sectarias.

Este acto de adoración de Pedrito el Niño del Espejito se emitió en franja horaria infantil dentro del nuevo programa infantil-juvenil-adulto-senil titulado “Vamos a contar mentiras” y, en el, las niñas y niñas siempre bondadosas y bondadosos que proceden del AVEX (Asociación de Virtuosos en la Extracción del Esfuerzo Ajeno) compartieron con el resto de niñas y niños obreritas y obreritos de sus empresas una parte de su comidita diaria, hermoso gesto de generosidad si pensamos que sus comiditas de trabajo suelen ser equivalentes a un sueldecito mensual de una obrerita o un obrerito.

El nuevo ataque -al idioma- de Chus Oretnom

Y la última historia de la semana que acaba que queremos relatar es el enorme disgusto de los padres de Chus Oretnom que, después de enviarla a un curso de recuperación de verano denominado “¡Aprende a hablar, tu puedes!; comprobaron que el esfuerzo económico ha sido inútil y Chus sigue siendo La Ministra Singular por la afición al tiempo y la persona verbal que permean todo su verbo florido.

Es más sus últimas ruedas de tortura-prensa le ha valido el sobrenombre de La Prosopopéyica tanto por la “gravedad y solemnidad afectada en el lenguaje o en la forma de actuar” (DRAE) que últimamente emplea como porque la imposibilidad de descifrar lo que dice atribuyen sus manifestaciones a “figura retóricas de pensamiento que consiste en atribuir a los seres inanimados o abstractos características y cualidades propias de los seres animados, o a los seres irracionales actitudes propias de los seres racionales o en hacer hablar a personas muertas o ausentes” (DRAE).

El que tenga oídos, que entienda