La civilización no suprime la barbarie, la perfecciona
Voltaire (F-M Arouet)
Rascad al hombre civilizado y aparecerá el salvaje
Arthur Schopenhauer
La ira es pura agitación, violencia, deseo de agredir, de herir, de atormentar, de dañar al prójimo, incluso a expensas del bien propio. El que la padece busca una venganza que irremediablemente acarreará su propia destrucción. Los sabios de antaño la definen como una locura breve
Lucio Anneo Seneca (El arte de mantener la calma)
Dedicadas a las víctimas -siempre inocentes- de la barbarie y la ira
CARTA DEL DIRECTOR
Cambiamos radicalmente de tercio (permítasenos la metáfora taurina) para seguir abusando de la generosidad de la pensadora existencialista, Yolandora, La Exploradora, quien nos obsequia, una semana más, con nuevas aventuras espaciales de avistamientos desde su famoso cohete el “Pujolet Progresista Chafalleiro” (el PPC).
EL DESFILE PROGRESISTA
El equipo de investigación en seguridad y patriotismo de este SSG nos brinda una crónica apretada del último avistamiento desde el PPC. Se trata del brillante Desfile del Progreso acontecido -¿o era cariacontecido?- esta semana que fallece -de horror- en El Paseo de los Recovecos de Maracas. Se trata de la Parada -o Fija Discontinua (¿o era Pija Esporádica?)- celebrada con ocasión del apasionante proceso de la desvestidura progresista. Presidió el acto el Emperador de Genomia, Pedrígula, quien fue recibido con las habituales muestras de entusiasmo y afecto por el público fascista. Desfilaron ante la tribuna numerosos líderas/os/es de las fuerzas del progreso, entre los que destacaron los tres siguientes:
a) Carlos Puigmalión, disfrazado -o no- de cabra de la Legión, abriendo paso a la rauda marcha de las Fuerzas Especiales Racistas del Noreste (FERANO). El ritmo de la marcha se fue acelerando al tiempo que la cabra Puigmalión iba percibiendo la urgencia de llegar a un acuerdo.
b) Urriol Ciénagas, alias Tirofijo que tuvo que practicar el pluriempleo porque:
b.1) Primero, se vio obligado a abrir el acto con un brillante salto en paracaídas desde una gran altura y portando una bandera de 666 colores del KKK. Lamentablemente, este salto terminó -como era de temer dados sus problemas de ajuste visual- de una forma un tanto accidentada cuando un error de cálculo en las distancias llevo a que se estrellara contra la estatua del Rey de Los Mares, sito en el centro de la Plaza, quedando enganchado en el mítico tridente por una parte especialmente sensible de su oronda anatomía.
b.2) Después, Tirofijo hubo de desfilar al mando de un vehículo blindado de que incorporaba una batería de defensa antiaérea de las Fuerzas Especiales Racistas del Noreste (FERANO). Desgraciadamente, en este caso la brillante exhibición acabo en tragedia cuando Tirofijo quiso hacer una exhibición de valor añadido en el proceso de desvestidura ante Pedrígula y activó el disparador de la batería de defensa antiaérea con tan mala fortuna que alcanzó de lleno a Carlos Puigmalión, que desfilaba unos metros más adelante disfrazado -o no, como hemos destacado- de cabra de la Legión; dejandólo/a destrozado en el acto. El gobierno de progreso infinito de Genomia ha abierto de inmediato una investigación para aclarar si estamos ante el fruto desgraciado de un problema visual o ante una muestra más de la concordia y el diálogo afectuoso que suele reinar entre las partidos racistas del Noreste de Genomia. Amén del proceso penal abierto por el acto de maltrato -último- al espécimen caprino.
c) La Parada (también llamada Fija Discontinua) se cerró con el desfile de la Madrina del acto, la Bella Aurupzia al mando de un revolucionario vehículo blindado de las Fuerzas Especiales Racistas del Norte (también denominadas FERANO) llamado Oluz, que permitía encerrar en pocos segundo a fascistas maketos como paso inicial de una larga y plácida estancia en el vehículo que acababa con su evaporización o liberación en función del pago del alquiler.
¡SOY LA VOZ QUE CLAMA EN EL DESIERTO!
CONTINUARÁ
TODO PARECIDO CON LA REALIDAD NO ES PURA COINDIDENCIA, SINO TRÁGICA REALIDAD Y EL QUE TENGA OÍDOS, QUE ENTIENDA